Creo que no existen palabras para transmitir cómo me he sentido en los últimos 15 días. Han sido días llenos de una energía única, maravillosa e indescriptible. Un nuevo círculo de amigos, una nueva compañía, reenamoramiento de mis labores.
A principios de esta semana ya lo tenía confrimado: dos de las personas que más quería conocer me confirmaron que venían a la Isla. Estaba recontenta y cuadré toda mi semana para poder dedicarles todos los segundos posibles y compartir con dos seres que, sin haberles visto jamás la cara, son super especiales para mi.
Y así el miercoles en la noche suena mi teléfono:
-"Guerrrrcome tu de ailan?"-pregunté entusiasmada
-"No chamita, nos dejó el avión"
-"Nooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo!!!!!"
-"Te lo juro chamita, llegué tarde al aeropuerto, pero mañana bajo temprano a ver si me puedo montar en algun vuelo".
Me puse triste, pero estaba convencida que lo mejor es lo que pasa siempre.
Me quedé en casa, apagué la compu, y me dediqué esa noche para mi. Me puse a ver tele hasta que me quedé dormida como una bebé.
A la mañana del jueves sonó el telefóno de nuevo:
-"Ya estamos aquí, me dieron el carro, estamos haciendo unas compritas y vamos para allá"
Y así fue... pasadas las once de la mañana, estaba recibiendo a Blogo y Superdharma
Esta noche nos vamos de parranda. Ya tomaremos fotos, pues la hemos pasado tan divinamente que no nos hemos parado en comas ni puntos.
Como me escribieron por ahí: Ya me encontraron... ahora me toca contar a mi...